CELEBRAR EL PROGRAMA

Empezar a grabar o transmitir en directo un programa puede ser una situación estresante para algunos y algunas participantes. Asegúrate de que estén a gusto y propón algunas técnicas para liberar la tensión y el estrés:

  • Ejercicios de respiración
  • Actividades breves para familiarizar con el uso del micrófono
  • Sacar el estrés de sus cuerpos
  • Hacer ejercicios de proyección de la voz

Lo más importante es transmitir las emociones a través del micro; para ayudar a tus participantes a conectar con las emociones puedes sugerirles que busquen su recuerdo radiofónico más antiguo y que lo compartan con el grupo.

Como facilitadores y facilitadoras, debemos guiar a las personas participantes hasta que encuentren su propio ritmo respetando sus decisiones. Decidid en grupo cómo vais a estructurar el programa y definid los roles de cada participante para que todo el mundo se sientan incluido y representado (roles como: presentador/a, periodista, técnico/a, entrevistado/a, etc.); por supuesto, podéis alternar los roles durante el programa.

Para dar una identidad a la emisión, pide a las personas participantes que le den un nombre (por votación o de otro modo) y que creen un jingle (la gente puede cantar, tocar instrumentos y utilizar su cuerpo…). La idea es hacer una música corta y fácil de recordar.

Recuerda de enseñar a tus participantes algunos de los principios periodísticos básicos. El/la conductor/a debe tener en cuenta las 5 preguntas: Quién, Qué, Cuándo, Dónde, Por qué para presentarse y presentar el tema de forma dinámica.

Para mantener la atención de la audiencia, ya abordamos la importancia de las emociones y ahora añadimos el TEMA elegido por las personas participantes: un tema que les afecte o por el que se sientan representadas para comunicar mejor sus emociones, compromisos y llegar a otras personas con su punto de vista.

Ten en cuenta que, si las personas participantes se aburren, el público seguramente se aburrirá mucho.

No olvides que tus oyentes son “ciegos/as”, sólo pueden remitirse a tu sonido y a tus palabras:

  • Habla lo más cerca posible del micrófono, de pie y con los pies en el suelo. Puedes trabajar tu postura con ejercicios para romper el hielo.

Nombra a las personas participantes, describe lo que está ocurriendo, ¡mantén el ritmo!